miércoles, 16 de enero de 2008

Desarrollo, participación y conocimiento



Recientemente algunos de los participantes del discurso sobre Ciencia, Religión y Desarrollo, nos hemos estado reuniendo para leer y comentar juntos el libro “La Senda del Aprendizaje en Latinoamérica: opción moral”, de Farzam Arbab, un muy interesante ensayo que presenta las reflexiones y experiencias de este científico, donde en conjunto con un grupo de colegas generaron una muy interesante propuesta en el campo del desarrollo rural en Colombia. A pesar de haber surgido en ese contexto específico, varios sentimos que tiene una aplicación más universal, pues justamente centra su reflexión en la necesidad de buscar nuevas estructuras y en la generación y aplicación del conocimiento, donde la ciencia y la religión tienen un lugar destacado.


En una parte central del libro, al compartir su experiencia sobre el surgimiento gradual de su propuesta de desarrollo centrado en el aprendizaje, este autor nos cuenta acerca de la conclusión a la cual llegaron al reflexionar sobre la relación entre participación, conocimiento y desarrollo: “Como lo mencioné antes, estábamos convencidos de que un cambio verdadero no se podía producir sin instituciones y estructuras que pertenecieran en un sentido real a la población misma. Sin embargo, entendíamos que la creación de nuevas instituciones o el fortalecimiento de las existentes en sí mismas no asegurarían la participación. Decíamos que un segundo elemento esencial, casi tan importante como la organización, era el conocimiento. Sólo puede decirse que un pueblo se ha hecho cargo de su propio desarrollo cuando aprende sistemáticamente acerca de los cambios de su sociedad e incorpora conscientemente en su continuo proceso de aprendizaje los elementos adecuados de todo el universo del conocimiento: el suyo propio, el sistema de conocimiento moderno, lo mismo que las experiencias de poblaciones y grupos similares en el mundo. Sólo cuando estos dos elementos, estructuras apropiadas y un proceso sistemático de aprendizaje con acceso al conocimiento global, se hubieran desarrollado completamente dentro de una población rural, podría ésta interactuar en condiciones de igualdad con el mundo de afuera y dejar de ser objeto de los planes, benéficos o no, de otros individuos e instituciones.” (pg. 46-47).

A lo largo del libro, el autor nos invita a ser actores sociales centrados en facilitar procesos de aprendizaje entre las masas de la sociedad, para que éstas sean los verdaderos sujetos del aprendizaje y del desarrollo en Latinoamérica. Pero, ¿Cómo lo podemos hacer? ¿Qué metodologías podemos usar? ¿Qué fuentes de conocimiento debemos tomar en cuenta? ¿Cómo combinar a la ciencia y la religión en este proceso?

Los invito a comentar estas preguntas y otras inquietudes en este blog,
un saludo afectuoso,

Daniel Duhart S.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

q buen tema! se me vino a la mente con la cita de Farzam Arbab que la modernidad desde sus inicios justamente fue eso lo que prometía: autodeterminación, tomar la historia en las manos para liberarse de sus yugos y sus males, cosa que no ha logrado todavía. Pero cómo puede ser logrado eso si no se tiene conocimiento de los proceso con que funciona la sociedad?

saludos

Naim

Simone GM dijo...

Hola, no alcance a ir y hablar mas del tema, pero aqui estamos via online, muchos exitos y pronto voy a estar en contacto por lo de los proyectos, por cierto lo de la lista de jovenes estudiantes se la voy a pasar a Ramin ok? y te estamos leyendo jaja
muchos saludos
Simone Gil Mondavi